Hasta el 8 de agosto las empresas de telecomunicaciones tendrán posibilidad de presentar sus propuestas para explotar la frecuencia de banda ancha más conocida como Internet 5G. En esta frecuencia la interconexión es muchísimo más rápida y recién a partir de ahí “los inteligentes” podrían ubicar los centros de datos para instalar Inteligencia Artificial. Aunque hoy otro detalle no menor.
Paraguay ya es de los últimos países de la región que no cuenta con este servicio. La licitación establecida por la Conatel sin embargo establece categorías y regiones. Así que la zona metropolitana de Asunción, Alto Paraná e Itapúa serán los primeros territorios desde donde la gente podrá descargar una película sin demora alguna, o verla en directo mientras viaja en un auto o tener una comunicación en línea sin pestañeos.
En los plazos manejados por el gobierno de Santiago Peña, en el primer trimestre del 2026 ya estaría lista la primera radio base activa en 5G en Asunción y Ciudad del Este.
Las empresas concursantes deberán contar con un capital mínimo de USD 10 millones de dólares para hacerse cargo del servicio, que en sub bandas les costará USD 500.000. Cada empresa deberá hacerse cargo de dos sub bandas, así que tendrá que invertir USD 1.000.000.
Hasta ahora desconocemos qué empresas se han presentado, pero se entiende que a esa licitación entregaron carpetas o lo harán, a través de operarios o por sí mismos, Tigo, Personal y Claro. Y, aunque con un pronunciado vaciamiento de la empresa estatal, Copaco SA.
La 5G no es otra cosa que una frecuencia radioeléctrica de quinta generación. La primera era la analógica.
Y como las frecuencias son estatales, esta vez lo que se licita es la frecuencia radioeléctrica de 3.500 MHz. De servicios telefónicos y de internet.
“Las operadoras en el país como Claro, Tigo y Personal no cuentan con la tecnología 5G y esta licitación lo que ofrece es la posibilidad de operarla en un rango de frecuencia llamado de 3.500 MHz”, sostiene el ingeniero Victor Martínez, miembro del directorio de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (CONATEL).
¿Vendrá “alguien inteligente” a Paraguay?
Ya se sabe que la banda 5G agiliza todo. Si con la generación 4G se puede transmitir 1 Gb de datos por segundo, en 5G se puede transmitir, en ese mismo segundo, 20 Gb.
En Argentina, Chile, Uruguay y Brasil ya existen.
“El desarrollo de redes móviles de quinta generación (5G) resulta crucial para la transformación digital de la sociedad y la economía. Además, trae aparejados crecimiento económico, mejoras en la productividad y cierre de brechas sociales”, sostiene, en su estudio sobre el tema, la Revista Latinoamericana de Economía y Sociedad Digital
El World Economic Forum estimaba en el 2020 que en el año 2035, la conectividad posibilitada por el 5G generará una producción económica por USD 3.6 billones, así como 22.3 millones de trabajos sólo en la cadena de valor del 5G, “lo cual se traducirá en un valor económico global de USD 13.2 billones”.
En abril de este año, el secretario de Estado norteamericano Marco Rubio, en uno de sus encuentros con legisladores de su país, había dicho que cualquier persona “inteligente” vendría a Paraguay a poner centros de datos para el desarrollo de Inteligencia Artificial.
Esto para usar la energía excedente principalmente de Itaipú que hoy Paraguay le cede a Brasil, pero que desde 2027 ya estará, según el Acuerdo de Entendimiento de abril de 2024, en venta libre al mercado brasilero.
Al decir del representante de Penguin Group, Bruno Viaccoti, “esa gente inteligente” hace rato ya está, pero que para ubicar centros de datos para Inteligencia generativa tipo Chap-Gpt se necesitan cuadruplicar la velocidad de conexión (lo que le brindará 5G) y la redundancia energética.
Con una instalación de desarrollo propio, de 15 años y más, “ya invertimos como para quedarnos. Hoy ya estamos con varios prospectos, entre ellos cambiar a Inteligencia Artificial”, sostiene, en entrevista con El Prisma, el vocero de esta empresa multinacional que hoy alberga servidores especialmente de criptominería.
Sin embargo, resuelta la cuestión de la conectividad estará por resolverse la segunda cuestión: la redundancia energética para que la carga eléctrica sea flat. Es decir, estable, continua.
De qué depende eso. Pues de que haya diversas fuentes interconectadas para que el sistema eléctrico nunca falle. Hoy nuestro sistema eléctrico depende casi exclusivamente de las aguas del Río Paraná.
Y ahí, en esa historia de nuevas fuentes de energía hay varios proyectos, todo en carpeta y en estudios.