Todos los incentivos que la iniciativa privada podría necesitar para generar energía eléctrica no hidráulica y de venderla y de administrarla serán muy pronto ley. Con media sanción de la Cámara de Senadores, en Diputados hay “pleno consenso”, adelanta el viceministro de Minas y Energía, Mauricio Bejarano. ¿De qué otras fuentes de energía hablamos? ¿Qué proyectos están en carpeta?
El proyecto de ley se denomina “De modernización del régimen que regula y fomenta la generación de energía eléctrica a partir de fuentes de energías renovables, no convencionales, no hidráulicas”. Tiene el propósito de modificar la Ley N° 6977/2023, de Energías Renovables No Convencionales (ERNC) de Paraguay. Esta norma estipula el fomento, la generación y utilización de energía eléctrica a partir de fuentes renovables, excluyendo la hidroeléctrica.
Hablamos principalmente de energía eólica y la fotovoltaica (paneles solares).
Todas las empresas o personas que quieran invertir en esas formas de generación eléctrica tendrán como marco de referencia una ley que les habilita, entre otras cuestiones, a vender a la propia Administración Nacional de Electricidad (ANDE) dicha energía por 30 años. Esta ha sido la modificación más importante planteada por el propio Ejecutivo a la ley anterior, la del 2023, para que sea “más apetecible” para los inversionistas.
Otro punto destacado por Bejarano es la creación de una entidad fiduciaria por parte de la ANDE para establecer dicha compra.
Igualmente, el proyecto establece que los inversionistas podrán generar para venta interna y para exportación. Y directamente para consumo propio por encima de 30MW.
Es decir, que una empresa, cualquiera, que necesite uso intensivo de energía podrá hacerse de su propia fuente, como tener un tanque de agua. Así como la cooperativa Chortitzer, por ejemplo, tiene su propia planta solar.
“Es un cambio diametral en el campo eléctrico”, asegura Bejarano.
La única fuente que no entra en este campo es la generación hidráulica, como Yacyretá, Itaipú o Acaray.
Salvo algunos paneles solares o la planta solar de la cooperativa Chortitzer, en Paraguay el reino de la energía producida por las empresas hidroeléctricas es casi total.
Actualmente, en el embalse de Itaipú del lado paraguayo se ensaya, en una hectárea, una planta fotovoltaica, la primera flotante en el país. En el agua. Este experimento ya está en fase de prueba. Se la energiza y se la desernegiza para ir comprobando gradualmente su efectividad, al decir del director de la Superintendencia de Energía Renovable de Itaipú, Pedro Domanizcky.
Entonces, se tendrá una nueva alernativa. La de ubicar paneles solares en las aguas.
El proyecto de la ANDE
Pero la urgencia de la modificación de la ley, de extender de 15 a 30 años el plazo para venderle a la ANDE, tiene que ver con un proyecto de la misma ANDE, de una planta fotovoltaica también en el Chaco.
Es que la idea de este gobierno es licitar una planta en el Chaco, no hacerse cargo de ella. Pero para eso, posibles inversionistas les dijeron que necesitaban más tiempo consagrado en la ley para vender el producto a la propia ANDE. Entonces, desde el Ejecutivo se trabajó este proyecto de ley que, en otras cuestiones, amplía el plazo por 30 años.
El propio jefe de Planificación de la entidad, Francisco Escudero, nos había confiado que que esto se ponga en marcha, aguardaban las modificaciones sugeridas en la ley para atraer la inversión del sector privado y de bancos de desarrollo.
La reunión parlamentaria
Ayer, tanto Bejarano como el presidente de la ANDE, Félix Sosa, se reunieron, en audiencia pública, con la diputada colorada Cristina Villalba, coordinadora de la comisión. Fueron básicamente a cerrar filas en torno del proyecto del Ejecutivo. De ahí, de ese lugar, Bejarano salió diciendo que hay “pleno consenso”, por lo cual el tratamiento en sesión ordinaria está pronto.