La convergencia digital y las múltiples plataformas han precarizado ostensiblemente el trabajo periodístico, ha establecido en su comunicado el Sindicato de Periodistas del Paraguay. Según los testimonios recogidos para esta nota, hay que escribir para el impreso, para el digital, conducir, tomar la cámara, ubicar en redes, salir en radio, en tv y en otras tantas plataformas más. “Todo esto se produce sin diálogo con los trabajadores”, sostiene el secretario general del SPP, Santiago Ortiz.
De todos los oficios del mundo, tal vez el oficio periodístico haya sido uno de los oficios más afectados por las grandes transformaciones de la era digital.
La primera gran transformación contemporánea en la redacción de contendidos se había significado en el cambio de la máquina de escribir a la computadora. Y de las fotografías analógicas, de revelados en piletas oscuras, a máquinas digitales.
Luego aparecieron los programas de diagramación que suplantaron a las diagramaciones en papel, y así también en la televisión los procesos más analógicos fueron informatizándose, primero, y digitalizándose después, con gran rapidez.
Los cambios impusieron grandes esfuerzos tanto de las empresas como de los trabajadores para una adaptación creciente, “para no quedar afuera”.
Pero la aparición de las plataformas digitales, de emisión de contenidos, ha sido tal vez la más grande interrupción contemporánea. Ya no se hace solo radio, se hace radio, televisión y plataformas: Youtube, Faceebook, Instagram…
Esta vuelta, la convergencia digital y las múltiples plataformas están generando una multifuncionalidad “en detrimento de las condiciones laborales y de la calidad informativa”, nos relata el secretario general del Sindicato de Periodistas del Paraguay Santiago Ortiz.
El gremio de trabajadores de prensa ve y vive casi todos los días ya esta realidad.
Si bien estaban ya en picado los periódicos en papel, durante la pandemia se han reducido “hasta un 50%” el plantel de periodistas en algunos medios”.
Hace poco, el Grupo La Nación cerró el diario principal.
La periodista Montse Berro, del diario Extra y la radio Monumental, nos cuenta que este paso a lo digital y las múltiples plataformas “nos orilla a escribir para el impreso, crear contenidos para redes, placas o videos, o escribir para el digital. Tres funciones a la vez: somos redactores, creadores de contenido y community manager”.
Toda esta polifuncionalidad “repercute en el producto final. Estás en la carrera entre el digital, el impreso y las plataformas. Y es estresante”, asume la periodista.
En algunos medios, con tradición en el diario papel, como ABC Color, se han impuesto las ocho horas. Antes, con el horario flexible, “había tiempo de ir a los lugares de cobertura, volver a casa, presentar el resumen y prepararse para escribir. Había más contacto con la gente, con las fuentes, ahora todo quieren que lo hagas frente a una computadora, ocho horas expuestas al chat, al correo, a la lectura por internet y la creación de contenidos permanentemente”, sostiene Ortiz.
Y luego, finalmente, “en muchos casos, ya fuera de horario laboral, entre comillas, hay que estar otra vez atentos a las plataformas por las reacciones y por la cantidad de likes. En muchos casos se trabajan, formalmente, menos horas, pero debés estar atento, siempre “conectado”, esgrime Wilberto Larroza, del Grupo La Nación.
“Queremos una mesa de diálogo con las empresas. La convergencia digital y las plataformas deberían servirnos para mejorar la calidad de vida de trabajadores y la calidad de la información que ofrecemos. Hasta ahora está sucediendo todo lo contrario. Tenemos más horas de trabajo y bajó la calidad del contenido que ofrecemos a la sociedad”, cierra Ortiz.
Foto de portada: Periodistas en el Día del Periodista, el sábado 26 de abril, frente al monolito de Santiago Leguizamón. Asunción.