“Todo suma, algo es algo”, asume mucha gente, “pero el problema de la canasta básica es un poco más complejo que 250 y 400 guaraníes menos por cada litro”, al decir del representante de una empresa de productos agroecológicos.
Con una canasta básica por las nubes, el propio presidente de la República Santiago Peña se encargó de anunciar que Petropar (Petróleos Paraguayos), la empresa distribuidora de combustible del Estado, bajará G. 250 cada libro de combustible, en todas las categorías. Dijo que se lo hacía pensando “en el bolsillo de la gente”.
Pronto la Shell redobló la apuesta y anunció la baja de hasta G.400 desde ayer. Luego le siguieron otros emblemas con rebajas de G.120 a 400.
El mercado de combustibles no es cualquier mercado. “Es transversal a toda la economía”, sostiene el asesor financiero y legal Stan Canova, quien, en entrevista con El Prisma, había exigido regulación.
“Cuando suben los precios nos dicen que es por la suba de los precios internacionales. Y cuando estos bajan, nos dicen que todavía no vendieron el stock anterior”, se quejaba en dicha entrevista.
Efectivamente, a fines de junio nomás se alzaban los precios G. 700 a 850. Entonces eran los bombardeos norteamericanos en Irán y los misiles entre este país e Israel la razón expuesta. Pero la alta tensión se disipó y acá los precios no bajaron. Aunque aquella vez Petropar bajó, asumiendo que tenía stock con precios anteriores, G. 380.
La finanza diaria
Hay quienes asumen que son “un desastre” para llevar la contabilidad de lo que su auto consume. Entre esta gente se encuentra Nelly Miranda. “Yo ni anoto, no tengo ni idea. Soy de las que viven a las corridas, y por necesidad cargo el combustible. No sé cuánto consumo por semana, pero sí consumo mucho, unos G. 300.000 a la semana. Y eso que tengo un picantito, motor chiquito”.
Hay otras que no solo anotan, si no que buscan promociones. Entre estas personas, Monserrat Fortino nos responde: “Síii, ayer a las 23.00 llené el tanque en la Shell y además lunes tengo 20 % de descuento”.
Madre de dos adolescentes, traumatóloga a domicilio, “todo suma, o resta mejor dicho”. En su recorrido usa 5 a 7 litros por día, “sin salirme de lo urgente y necesario”.
Si tomamos por promedio seis litros, pues a ella le quedará por día G. 2.400, lo que al mes le sumaría G. 72.000
Raúl Soverina, uno de los fundadores de Tu Kokue, una empresa de productos agroecológicos, usa 40 litros por semana. De Luque, Asunción y alrededores, gasta en la semana G. 350.000. Si comprara de Petropar podría “ahorrar” G. 10.000 por semana.
“Si esto repercute en la canasta básica, genial, pero creo que el problema de la canasta básica es mucho más complejo que G. 250 en combustible. Es como querer tapar el sol con el dedo”, sostiene.
Leonor Díez Pérez es de llevar cuenta de todo. Dueña de una bodega, todos los números son importantes. A ella, que hace un recorrido Mariano Roque Asunción, y que carga, generalmente, en la Shell, “la diferencia va a ser muy distinta que el mes anterior”.
Las plataformas
-Qué ofertón- responde, con una media sonrisa, Luis Torres, trabajador de Bolt y Uber desde hace siete años.
Asume que en sus recorridos de ocho a diez horas usa 14 litros por día. Hace el cálculo mental. Si comprara de Petropar se “ahorraría” (y sería parte de su “ganancia” diaria) G. 3.500, y si lo hiciera en la Shell, un poco más. “Qué ofertón”, se repite. Una empanada en su local preferido le cuesta G. 5.000.
Vaivén tormentoso
“Es un vaivén muy tomentoso. Alzan 700 y te bajan 300, más o menos. Estamos a merced de un monopolio privado y de los precios internacionales”, arriesga Héctor Fleitas, ex jefe de planta de Petropar.
Paraguay importa combustible terminado por un valor de USD 2.000 millones anuales. Sin capacidad de refinar, y por lo tanto de importar crudo, se paga mucho más que en otros países importadores con capacidad de refinamiento.
En Paraguay, buena parte del presupuesto familiar va en transporte, ya sea en autos, motos, movilidad por plataformas y por último el bus. Sí, los colectivos, también todos movidos (a excepción de los 30 buses de Ciudad del Este) a gasoil, transportan solo al 8 por ciento de la población metropolitana, según el último informe del Banco Mundial.
En ese vaivén de precios que plantea Fleitas es muy difícil asumir una proyección en la baja de precios de las mercancías.
“Es muy difícil, porque mañana mismo eso que proyectás, por ejemplo en flete, te queda en saldo rojo”, esgrime el economista Raúl Lezcano.
En fin, algo quedará, hasta nuevo aviso, en el bolsillo de la gente, que en el caso de quienes no guardan números en el rosario ni se notará.
Para quienes manejan los números y las planillas diarias y mensuales con bisturí, “todo suma o todo resta”.
Petropar, la más extendida distribuidora en el país, tiene 286 estaciones. Acá les dejamos con los nuevos precios:
| Diésel Porã | G. 7.050 | 11/08/2025 |
| Diésel Mbarete | G. 8.850 | 11/08/2025 |
| Nafta Kape 88 | G. 5.990 | 11/08/2025 |
| Nafta Oikoite 93 | G. 6.490 | 11/08/2025 |
| Nafta Aratiri 97 | G. 7.840 | 11/08/2025 |