Financiamiento de buses a través de una entidad fiduciaria, un foro ciudadano y la promoción de mujeres al volante son algunas de las innovaciones del ante proyecto “que regula y moderniza el sistema de transporte y el servicio de transporte público metropolitano de pasajeros”.
El jueves último el Poder Ejecutivo presentó oficialmente, a través del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones, su plan de reforma del sistema público de transporte.
Con un ante proyecto de ley de 157 artículos, el gobierno introduce una serie de cambios en la administración del transporte en Paraguay.
De todos estos cambios, lo que resulta muy claro es que, ya sea para transportes metropolitanos, entre ciudades o nacionales e internacionales, el órgano rector será el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones.
En lo central, el viceministerio de Transporte será el encargado rector de la zona metropolitana (Asunción y ciudades vecinas), los municipios de los buses internos y Dinatrán (Dirección Nacional de Transporte) de los buses de mediana y larga distancia.
En fin, un reordenamiento de roles de instituciones ya existentes.
En sus considerandos e ideales expresos, el servicio público debe garantizarse siempre, respetando el derecho de acceso de las personas al sistema de transporte público y cuidando que este sistema sea de calidad y en armonía con el medio ambiente. Establece mecanismos de control de frecuencias y la vigilancia constante recorridos, frecuencias, y sobre el billetaje eléctrico y otras modalidades de pago, incluido el efectivo.
En relación con esto, la ministra de Obras Públicas Claudia Centurión sostiene que quieren “integración tarifaria, monitoreo en tiempo real y que cada persona pueda saber desde su celular cuándo llega su bus”.
Tal vez lo más preciso e innovador vaya a ser la creación de una entidad fiduciaria para la administración y adquisición de nuevos buses.
Ya en el 2024 el gobierno de Santiago Peña había anunciado el interés en la compra de 1.000 buses, sin establecer cómo, con qué plata y en qué términos.
Tal vez el espíritu del proyecto deba buscarse en la licitación emprendida para adjudicar los 30 buses eléctricos chinos, donados por Taiwán. Es decir, que el Estado adquiera (en ese caso por donación) los buses y que luego ponga a licitación su manejo y administración.
Y he acá tal vez lo más novedoso del anteproyecto. En su artículo 93 se crea el “Fideicomiso de Administración del Financiamiento del Servicio de Transporte Público de Pasajeros”, o “Fideicomiso”.
Esta entidad tendrá a su cargo la administración de los recursos para el financiamiento del servicio de transporte público metropolitano de pasajeros, el pago a prestadores, el pago a prestadores del Sistema Nacional de Billetaje Electrónico y, en general, el pago de las obligaciones derivadas de los compromisos firmes y contingentes cuantificables a que se podría obligar el Estado en el marco de la presente ley.
En el mismo ante proyecto se estable que este Fideicomiso será administrado por la Agencia Financiera de Desarrollo (AFD), en carácter de Fiduciario, en el marco de la Ley No. 921/96 “De Negocios Fiduciarios”, en un patrimonio separado del propio. En calidad de Fideicomitente, actuará el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones.
De dónde se sacarán los recursos
En artículo 92, de los recursos para el financiamiento del servicio, se sostiene que los recursos para el financiamiento del servicio de transporte público metropolitano de pasajeros podrán provenir del billetaje electrónico, del fondo de promoción de transporte eléctrico, las tarifas por la prestación de servicios complementarios, las multas, los intereses generados por la mora en el pago de cánones, talas y multas y la propia rentabilidad de las inversiones y operaciones del Fiduciario…
Mujeres y foro
El anteproyecto, igualmente, establece medidas e incentivos para que las mujeres trabajadoras accedan al volante. Esto se tendrá en cuenta en el momento de las licitaciones, se ubicará en los pliegos de bases y condiciones como puntos favorables -y tal vez condiciones- a las empresas que presenten plantillas de trabajadoras. Igualmente, el anteproyecto instaura un foro ciudadano, que deberá analizar y vigilar el buen desenvolvimiento general del sistema.
“El transporte debe crecer con la sociedad, evolucionar con sus necesidades y mantenerse vivo”, sostiene la ministra Centurión.