Un nuevo informe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) explora las transformaciones que están ocurriendo en los lugares de trabajo de la gente en todo el mundo.
¿Cómo las nuevas tecnologías emergentes están mejorando la salud y el bienestar de los trabajadores, y al mismo tiempo traen nuevos riesgos y amenazas para los trabajadores?
Esta es la pregunta central que responde el informe titulado Revolución de la seguridad y salud: Papel de la IA y la digitalización en el trabajo . Es un informe elaborado por los expertos de la OIT, en el que se exponen datos, informaciones y contextos específicos de muchos lugares de trabajo en el mundo, se los analiza y luego se sacan conclusiones generales.
El Informe destaca que, al asumir tareas peligrosas, ayudar en las intervenciones quirúrgicas y optimizar la logística, los robots contribuyen a reducir los riesgos para los trabajadores del mundo y mejoran la eficiencia con la que realizan sus labores. Igualmente, señala el documento que los sistemas basados en IA mejoran la seguridad y la vigilancia de la salud, y agilizan las tareas y las operaciones, aliviando la carga de trabajo e impulsando la innovación, incluso en sectores tradicionalmente poco tecnológicos.
Sin embargo, el informe también resalta la necesidad de políticas proactivas para garantizar que estas tecnologías se apliquen de forma segura y equitativa, de forma que se sorteen sus riesgos y desafíos para los trabajadores del mundo.
«La digitalización ofrece inmensas oportunidades para mejorar la seguridad en el lugar de trabajo. Los robots pueden sustituir a los trabajadores en «trabajos 3D» peligrosos, considerados como sucios, peligrosos y degradantes. La automatización puede reducir las tareas repetitivas, como en las líneas de producción de las fábricas o en el trabajo administrativo, permitiendo a los trabajadores asumir tareas más desafiantes», asume Manal Azzi, Jefa del equipo de medidas de Seguridad y Salud en el Trabajo (SST) de la OIT.
«Pero para beneficiarnos plenamente de estas tecnologías, debemos asegurarnos de que se aplican sin incurrir en nuevos riesgos», advierte Azzi.
Impacto de la tecnología en la seguridad y la salud
El documento de investigación y análisis destaca que la robótica, la automatización y el uso de la realidad virtual y ampliada transformando la seguridad y la salud al prevenir accidentes y reducir las exposiciones peligrosas.
Igualmente, las nuevas herramientas como los dispositivos inteligentes para llevar puestos que proporcionan detección de riesgos en tiempo real o los sensores ambientales que rastrean la calidad del aire.
La digitalización está propiciando el aumento de las modalidades de trabajo híbridas y a distancia, que crean flexibilidad y mejoran la salud mental de los trabajadores.
Sin embargo, estos avances también pueden traer consigo nuevas inseguridades.
Mientras que los robots asumen tareas peligrosas, los trabajadores que mantienen, reparan o colaboran con estas máquinas pueden enfrentarse a nuevos peligros, como en los casos de comportamientos imprevisibles de los robots, de fallos del sistema o de las ciber amenazas.
Concluye el estudio que la dependencia excesiva de la IA y la automatización pueden reducir la supervisión humana. Esto, su vez, aumentaría los riesgos para la SST, mientras que las cargas de trabajo basadas en algoritmos y el hecho de estar continuamente conectado pueden contribuir al estrés, el agotamiento y los problemas de salud mental de las personas.
El informe también revela los riesgos de seguridad y salud a los que se enfrentan los trabajadores a lo largo de la cadena de suministro digital, desde los que participan en los procesos de extracción hasta los que alimentan la IA, así como los trabajadores encargados de la gestión de residuos electrónicos.
Política mundial y papel de la OIT
El documento pone de relieve las lagunas normativas en la gestión de los riesgos para la SST vinculados a la digitalización y hace un llamamiento para que se refuercen las políticas mundiales, regionales y nacionales. Los convenios sobre SST de la OIT proporcionan una base para garantizar el derecho a un lugar de trabajo seguro y saludable en la era digital.
“Las políticas y normativas de todo el mundo incluyen cada vez más nuevas medidas que cubren la seguridad robótica y la interacción humano-robot, el derecho a la desconexión, la mejora de la gestión algorítmica del trabajo, el teletrabajo y el trabajo seguros en plataformas”, se lee en un pasaje del documento.
Por último, se subraya la participación de los trabajadores en todas las fases de adopción de la tecnología como algo esencial. Las iniciativas de formación y sensibilización son fundamentales para garantizar un uso seguro de las nuevas tecnologías. “Será necesario seguir investigando para comprender plenamente las repercusiones a largo plazo de la transformación digital en la seguridad y la salud en el trabajo”, concluye.